divendres, 24 de febrer del 2017

OPINIONS, OPINEM, ENS OPINEN

Siempre nos ha fascinado esto de las opiniones. Al principio nos sorprendió, después nos intrigó y al fina nos indignó por lo falsas, exageradas, mal intencionadas, grasientas, livianas, faltas de sentido real, faltas de objetividad y así, un largo etcétera.
También al principio nos consolábamos pensando:es por nuestro bien, así aprendemos, podemos modificar los fallos que nos adjudican, podremos mejorar en nuestro trabajo del día a día.
Hasta aquí todo bien, correcto. Todos los manuales, artículos, reportajes y reuniones sobre este tema hablan de lo mismo. De la necesidad que tiene el mercado de que los clientes puedan opinar porque esto ha hecho que el sector corrija muchas cosas. Puede que si. Seguramente también por eso pero yo creo que el sector ha mejorado porque se ha adecuado a la legislación que se aplica, por propio interés y por la necesidad de ser competitivos.
Vamos al otro lado. ¿Por que opinan los clientes? Por prepotencia? presunción? ganas de protagonismo? venganza? La noche no ha ido como yo esperaba pues toma! Me lo cargo porque puedo!
A nosotros nos ha tocado de todo. Bueno o malo siempre respondemos. Pero, que curioso, siempre tenemos la sensación de que nos estamos examinando, siempre pensamos ¿habremos fallado en algo? A ver a ver como resultará esta vez y esto es porque cada cliente es una incógnita y una sorpresa. Algunas veces los clientes se han ido contentos¿? y luego te encuentras el tinglado en alguna que otra web especializada. Y entonces nos convencemos de que la noche no les ha ido bien, posiblemente se ha cruzado alguna jaqueca inoportuna o quizás la compañía elegida para pasar la noche o el finde no ha colmado las expectativas. Triste, porque al fin nosotros sobrevivimos y aprendemos y corregimos cosas y mejoramos todo lo que podemos. Peor ellos que quedan con el fracaso y sabiendo que al fin, una mala opinión no duele, hace que se aprenda y vayas limitando tus servicios a lo justo y se pongan limites a las demandas.  Con una gran sonrisa y la mejor de las simpatias les dices si pero esto, esto y esto y además deben, deben y deben. Así se aprende, opinan y tu eliges como van a pasar un finde en tu casa.
M.S.

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